México continuó viviendo tiempos violentos a través de la
revolución de Ayutla, la promulgación de la Constitución de 1857 y la Guerra de
Reforma. La clase política continuaba dividida, por una parte los liberales
cuyo proyecto de nación era republicano, federalista y democrático; y por otra
parte, los conservadores que anhelaban un sistema monárquico y centralista.
Ambas fracciones solicitaron ayuda extranjera firmando tratados que pusieron en
riesgo la soberanía del país: El Tratado de Mon-Almonte y el Tratado
McLane-Ocampo. Por otra parte, el presidente estadounidense James Buchanan
anunció al congreso de su país, el deseo de "ayudar" a México para
impedir que las potencias europeas interviniesen en América, siendo sus
intereses velados obtener los territorios de Sonora y Sinaloa. Para fortuna de
México, el congreso estadounidense rechazó la propuesta, y ninguno de los
tratados firmados fueron ratificados, pues los liberales vencieron a los
conservadores el 22 de diciembre de 1860 en la Batalla de Calpulalpan.
Benito Juárez fue electo presidente, al tomar el cargo el
16 de julio de 1861, decidió suspender el pago de la deuda del Estado por dos
años. España, Francia e Inglaterra, principales acreedores de México firmaron
la Convención de Londres el 31 de octubre, formando una alianza tripartita para
exigir la protección de sus súbditos, el pago de la deuda, y la creación de un
régimen estable en el país americano. Una cláusula establecía no pretender
ninguna adquisición de los territorios mexicanos. A principios de 1862 las
escuadras de los tres países arribaron a Veracruz. El 19 de febrero se firmaron
los convenios de la Soledad, pero las intenciones de los franceses quedaron al
descubierto cuando el comisionado Dubois de Saligny se empeñó en destruri la
alianza tripartita y reclamó una cantidad exagerada como indemnización (doce
millones de pesos), sin respaldo o documento comprobatorio. Paralelamente el
conservador Juan Nepomuceno Almonte se había entrevistado con Napoleón III
gestionando el apoyo para derrocar al gobierno liberal de Juárez, el 6 de marzo
un refuerzo francés al mando de Charles Ferdinand Latrille desembarcó en
Veracruz. El comisionado inglés Charles Wyke y el comisionado español Juan Prim
instaron a Saligny a respetar las condiciones del Convenio de Londres, ante la
negativa del francés, las tropas inglesas y españolas abandonaron las costas
mexicanas a finales de abril.
La Segunda Intervención Francesa en México fue comandada
por el general Latrille, quien llevó el avance de sus tropas a través de
Fortín, Orizaba y las Cumbres de Acutzingo. El 5 de mayo se confrontó la
Batalla de Puebla, en la cual salieron victoriosas las fuerzas mexicanas bajo
el mando del general Ignacio Zaragoza. La victoria mexicana elevó la moral y el
nacionalismo, pero la derrota fue una sorpresa para los franceses y Napoleón
III consideró el hecho como un escarnio, por tal motivo, comisionó una nueva
expedición bajo el mando el general Élie-Frédéric Forey, quien poco más de un
año después de la derrota tomó la plaza de Puebla, el 17 de mayo de 1863. En
esta ocasión el avance de las fuerzas francesas fue contundente y la Ciudad de
México fue ocupada el 10 de junio del mismo año.
Juárez tuvo que huir por la ruta de San Luis Potosí,
Saltillo, Monterrey para llegar a Paso del Norte. Los conservadores por medio
de una comisión, presidida por José María Gutiérrez Estrada, ofrecieron a
Maximiliano de Habsburgo el trono del Segundo Imperio Mexicano. El monarca
aceptó bajo las condiciones de los Tratados de Miramar que fueron firmados el 1
de abril de 1864 y desembarcó en el puerto de Veracruz el 28 de mayo. El
ejército francés y las tropas conservadoras apoyaron al nuevo emperador, pero la
resistencia liberal continuó su lucha a través de la técnica de guerrillas.
En Europa, la hegemonía de Francia se vio amenazada
cuando Prusia venció a Austria en la Batalla de Sadowa. Por otra parte, al
terminar la Guerra de Secesión en los Estados Unidos, el gobierno de este país
advirtió al gobierno francés que haría respetar la Doctina Monroe. Ante tales
expectativas, Napoleón III decidió retirar a su ejército de México y recomendó
a Maximiliano abdicar al trono.
Es una bandera francesa
Es una pintura de Maximiliano de habsburgo.
Es la representacion deuna batalla entre Mexico y Francia.